La vuelta de Por el Mundo en la pantalla de Telefe, el popular programa de viajes conducido por Marley, ha estado rodeada de una gran polémica. El motivo: una entrevista programada con Mauro Icardi en Turquía, que generó especulaciones sobre una posible «traición» a Wanda Nara, una de las figuras más importantes del canal.
La empresaria regresó a Argentina este fin de semana, tras unos días en Europa, y enfrentó los rumores de un supuesto enojo con Marley y Susana Giménez, quienes la habrían acompañado en el primer programa. Ante la teoría de un «golpe bajo» por parte de Telefe, la mediática dio una respuesta contundente: “Hace tres años que Telefe me paga un sueldo”.
Sin embargo, uno de los cronistas presentes le recriminó que el canal también da espacio a Mauro Icardi y a la China Suárez. Fue en ese momento que Wanda hizo una inesperada confesión: “Pero les pasé yo el teléfono de mi ex”. Ante la sorpresa generalizada, la empresaria explicó que estaba en contacto constante con Fede Levrino, productor del programa, y que este le solicitó el contacto de Icardi para concretar una entrevista.
A pesar de la versión de Wanda, el panel del programa Infama calificó su actitud como una falsa «superación» y una estrategia mediática. Karina Iavícoli fue especialmente crítica: “Es menos creíble eso como que yo me convierta en ministra de Economía. O sea, el teléfono de Icardi lo tiene todo el mundo. Cualquier producción levanta un tubo y lo pide. Me parece que ella lo que quiere mostrar es ‘estoy más allá de todo lo que dicen’”, opinó la periodista.
Esta nueva versión de los hechos por parte de Wanda Nara introduce un nuevo giro en la polémica, sugiriendo que, lejos de ser una traición, la entrevista fue, al menos en parte, avalada por ella misma. Sin embargo, las dudas persisten sobre la verdadera motivación detrás de su decisión.
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