La esposa de “Fierrito” Ramírez reveló lo ocurrido en el naranjal, en donde se habría producido la desaparición del menor.
Ya pasaron más de siete meses desde que Loan Danilo Peña desapareció tras haber participado de un almuerzo en la casa de su abuela Catalina. Hasta la fecha, la Justicia no ha conseguido una pista firme que pueda llevar a saber sobre qué pasó con el menor de cinco años. Por el caso, hay siete personas detenidas. Una de ellas es Monica del Carmen Millapi que actualmente se encuentra con prisión domiciliaria en Neuquén.
En diálogo con Radio Dos, Millapi dio detalles desconocidos –hasta ahora- sobre lo ocurrido en el momento que fueron al naranjal con Loan, lugar donde fue visto por última vez.
Narró que el día que se pierde Loan ella había realizado su habitual trabajo de repartir panes en los negocios de 9 de Julio y que al llegar a su casa –en horas del medio día- lo encuentra en el fondo a su marido (Daniel “Fierrito” Ramírez) en compañía de Antonio Benítez (esposo de Laudelina Peña), quien quería saber si iban ir a la invitación de almorzar en la casa de Catalina.
Millapi recuerda que tenían duda sobre si asistirían a la reunión porque el hermano de su marido, en ese entonces, se encontraba internado y ese día (13 de junio de 2024) le iban a dar un resultado sobre su estado de salud. Pero, finalmente se inclinaron por participar del encuentro que lo organizó la abuela de Loan para celebrar el Día de San Antonio
“Nos fuimos en auto y llegamos cuando ya estaban por comer. Estaba la camioneta de (Pérez) Caillava y me parecía extraño porque las otras veces que fuimos nunca había gente”, contó Mónica sobre el momento que arribaron al campo , en paraje Algarrobal, y luego añadió: “Si me decían que había gente, yo no iba a ir porque no estoy acostumbrada a relacionarme con personas que no conozco. No soy de tener contacto con los vecinos de 9 de Julio”.
Posteriormente, comentó que tras finalizar el almuerzo, Benítez le ofreció ir a buscar naranjas a Ramírez, pero rechazó la invitación porque “recién terminaba de comer y estaba lleno”. Ante esta respuesta, Benítez de igual manera se dirige hacia el naranjal.
Minutos después, “Fierrito” cambia de decisión y se va también a “buscar naranjas”. “Al rato me dice Laudelina que nosotras también vamos ir al naranjal junto con su hija Macarena. Decidí irme porque estaba un poco incomoda al estar sentada con gente que no conozco. Las otras veces que habíamos ido (a la casa de Catalina), nunca nos fuimos a la parte de campo y monte”, recordó Millapi.
Luego, contó sobre lo ocurrido camino al naranjal y al respecto dijo que “cuando salimos estaban todas las criaturas. Al salir noto que Laudelina estaba con Loan al lado de la tranquera. Los veía que estaban hablando pero no los escuchaba porque yo estaba alejada. Nos fuimos por un caminito que no conocía, pero Laudelina me iba indicando que ese lugar es calle. Al llegar al final del camino nos encontramos con una tranquera y en el lugar estaba mi marido perdido porque no lo encontraba a Benítez. Ahí, Laudelina le indica dónde se tiene que ir y ahí se va mi marido. Mientras, nosotros cruzamos la tranquera y los chicos corrieron para todos lados”,
“Cuando paso la tranquera veo que Laudelina y Macarena pegan la vuelta para volver sin avisarles a los chicos. Mientras que mi marido se dirigía para donde le indicó Laudelina. Entonces decido ir con mi marido porque iba seguir estando incomoda si volvía. Una vez que llegó al naranjal me di cuenta que los nenes me siguieron e inclusive Loan”, reveló .
Después, dijo que su marido recibió una llamada por parte de su hermana para contarle sobre los resultados de los estudios médicos que le realizaron a su hermano y los tratamientos que debía seguir.
Continuando con su relato, la esposa de Ramírez contó: “A lo primero estaba pendiente de los chicos pidiéndoles que se bajen de los árboles, que salgan de las tacuaras y dejen los palos. Estaba pendientes de ellos, pero también de mi marido (mientras hablaba por teléfono), ya que no venía bien de salud y tenía miedo que se descompense entonces me quedaba mirándolo cómo reaccionaba. Al cortar la llamada me dice “ya vamos negra, vamos ya””.
“Entonces salimos del naranjal. Benítez y mi marido iban adelante y yo un poco más atrás, mientras que las criaturas corrían, gritaban, jugaban y saltaban por todos lados. Luego, empiezo a ver que faltaba un chico pues le digo a mi marido que faltaba un nene pero no me escucha a pesar de que no iban tan lejos, además los chicos gritaban y había viento fuerte. En eso, se acerca mi sobrino y le pedí que vaya a avisarle a su tío que falta un chico. Es ahí que Benítez dijo que faltaba su sobrino Loan”.
“Nos quedamos parados donde me di cuenta que faltaba un chico, mientras que mi marido y Benítez vuelven al naranjal para buscar a Loan. Me quedo esperándolos con los demás chicos. Escuchaban que lo llaman “Loan, Loan, Loan”. Ahí me entero como se llamaba. Lo buscan y al no encontrarlos vuelven hacia nosotros. Ahí uno de los chicos contó que Loan le dijo que se iba cerca del papá. Entonces mi marido le dice a Benítez que llame para preguntar si ya llegó a la casa (de Catalina). Benítez lo llama a Laudelina para preguntarle si ya había llegado Loan y le respondió que no”.
“En esa situación, Benítez vuelva a buscarlo en el naranjal, mientras que mi marido comenzó a buscarlo por un descampado. Después vuelven, dsde el monte, Laudelina y Camila donde estábamos nosotros. Ahí empezamos a buscarlos todos juntos, pero no lo encontramos”, indicó Millapi.
En otra parte de la entrevista, dijo qué pudo haber pasado con Loan: “Creo que alguien se lo tuvo que haber llevado, porque mucha gentelo buscó como para no encontrarlo”. Además, aseguró que ella “sospecha de todos los que estuvieron el día del almuerzo” y que desconoce si la desaparición “estuvo preparada” porque “Loan no estaba por ir y creo que se querían llevar a otro chico”, enfatizó.